Renuncia del Arzobispo José Antonio Eguren Anselmi en medio de investigaciones contra Sodalicio de Vida Cristiana
InfolegalEl Arzobispo de Piura, José Antonio Eguren Anselmi, ha sorprendido al presentar su renuncia anticipada en medio de una profunda investigación sobre el Sodalicio de Vida Cristiana en Perú, un movimiento religioso envuelto en acusaciones de abusos y corrupción.
La confirmación de la renuncia fue realizada por InfoVaticana después de meses de intensa pesquisa liderada por la Santa Sede, encabezada por el Papa Francisco. El escrutinio ha sido dirigido por los investigadores Jordi Bertomeu y Charles Scicluna, quienes han viajado al Perú en varias ocasiones para reunirse con denunciantes y miembros del Sodalicio, recabando información clave para el informe final presentado al Papa.
Eguren Anselmi, hasta su renuncia ocupaba el cargo de arzobispo de Piura, su nombre ha estado estrechamente ligado a escándalos que involucran abusos físicos, psicológicos y sexuales dentro del Sodalicio, así como acusaciones de actividades delictivas como el tráfico de tierras, a pesar de que según el derecho canónico los obispos renuncian a los 75 años, él lo hizo a sus 68 años.
El Arzobispo, nacido el 14 de junio de 1956 en Lima, ha desempeñado varios roles importantes dentro de la Iglesia Católica en Perú, incluyendo el de obispo auxiliar de Lima antes de su nombramiento como arzobispo de Piura en 2006.
Las acusaciones contra Eguren Anselmi fueron amplificadas por el periodista Pedro Salinas en su libro de 2015 “Mitad monjes, mitad soldados”, donde señaló la existencia de delitos y lo acusó de estar directamente involucrado en una trama de tráfico de tierras en Piura, vinculada a una organización criminal conocida como La Gran Cruz.
Estas revelaciones provocaron un intenso debate sobre las actividades del Sodalicio y sus líderes, llegando incluso a los tribunales donde Salinas fue condenado en 2019 por las acusaciones vertidas contra el prelado.
Las denuncias de campesinos afectados por prácticas extorsionadoras de empresas vinculadas al Sodalicio también jugaron un papel crucial en la investigación, exacerbando la controversia en torno a Eguren Anselmi y su conexión con la institución religiosa.
